ZINE


scanner y colección Thabeat

Nadie sabe cuanto durará la experiencia de los editores de la publicación especializada o artesanal -zine, en su esfuerzo por sacar adelante el modelo de impreso más antiguo de Europa. Impreso que, en definitiva, y ya sin recursos a la nostalgia, es un medio de expresión más que este país requiere, que este país necesita, pero que no financia desde donde podía hacerlo. Sobre los arriesgados editores se ciernen mil cuervos de todas las calañas. Pero el peor de ellos es el escepticismo.

Porque el escepticismo es el mejor aliado de esos tres o cuatro polos de poder –por llamarlos de una manera fresca- que controlarán la poca prensa que vaya quedando en esta tierra, poca gracias precisamente a otros tantos polos de poder que casualmente suelen coincidir muchas veces con los anteriores. Porque el escepticismo se produce por falta de alicientes. No hay alicientes porque no se invierte. No se invierte porque no hay rentabilidad. No hay rentabilidad porque los costes son altos y la publicidad se va a las revistas gratuitas o de multinacional -kiosco.

Y esas revistas dan un poder seguro y fácil de controlar. No crea problemas, aquieta las conciencias, aunque ni siquiera las informa ni las divierte. Porque, encima, es un modelo de revista mala. Mientras tanto, en las pocas publicaciones que malviven, quedan algunos heroicos residentes que van viendo la caída en picado de los cuervos.Los cuervos tienen una gran capacidad para sobrevolar sobre los cadáveres todo el tiempo que haga falta. Se irán comiendo uno tras otro los impresos artesanales a pesar de las resistencias heroicas de muchos. La realidad separa dos miserias: La empobrecida desde los siglos y la miseria moral del aburrimiento.