KROMATIK KONSTRUCTIONS


scanner y colección Thabeat Valera

Abel, en este país no se lee. La esencia y el bagaje emocional del fanzine vienen a ser tu propio amor al arte combatiendo cuerpo a cuerpo con los gastos y las pérdidas. Un proceso laborioso que se acerca más a las caóticas maneras de crear un cómic subterráneo, pero que resulta gratificante para el noble arte de la maquetación. Con una extensión y características comprendidas bajo una secuencia gráfica que se plasma en un fotomontaje modelado y rotulado a mano. Todo ello, casado a ojo de buen cubero, con la impresión reventada en blanco y negro, y sin notorio contraste acromático –escala de grises. El color nunca cae del cielo, lo que produce un sensible deterioro de las virtudes de las obras originales. Todos pasamos por alto las precariedades de edición e interpretamos cabalmente el sentido de esas imágenes sin tramar. Nos consolamos con poseer tal edición. Son los bocetos iniciales de cualquier número “zero”, presentados a fotocopia. El coste mínimo. Una factura impecable y artesanal made in “The Artistic Terrorism” (TAT). Cuatro exquisitos números de Kromatik a cargo de Fear aka Pix aka Galleta con estrecha colaboración de Shot y Pato. Ovación, despedida y cierre.