ALEX KANEVSKY












scanner y colección Thabeat Valera


Decía Roland Barthes al referirse a una fotografía en su Cámara Lúcida, que el rostro que tenía ante sí "había sido y ya no era". Que había pretendido existir siempre al posar frente a la cámara, pero que a la vez que ésta había dejado su silueta estampada para la posteridad, había recortado sobre su celuloide el perfil de la muerte.

Alex Kanevsky, estudió Bellas Artes (1979-82) en Vilnius, Lituania, país de origen.  El ajetreo para no ir a ninguna parte, y la marabunta de los sedientos del arte, Kanevsky se traslada a Philadelphia, en 1998, apresado por su propio destino. El rostro sigue esa inusitada filosofía del filósofo francés la mascara de óbito, pero su pintura es también el antifaz de la cumbre entre el clasicismo y la modernidad: magistrado, ministro, consejero, académico, autodidacta y vocal de la pintura eterna.