HOMEMADEIN

scanner y colección Thabeat
arte por Thabeat

El palo y la piedra. Las armas primitivas desde que originó la humanidad. Sencillo, ¿no? Algunos humanos, ingeniosos y apañados, han ido creando sus propios objetos desafiantes sin más complicaciones. Si tenemos en cuenta que la tipografía es el golpe o huella, HOME MADE IN es el artefacto que cumple con la etimología del propio graffiti; la construcción de nuestro propio marcador para el bombardeo. Reúne la esencia de todo arte bélico. Un recurso popular barato, subterráneo, pernicioso, casero y simple. En definitiva, el ideal.


Ninguna empresa fabrica el producto adecuado en el momento adecuado. Los objetos cotidianos han otorgado todo tipo de facilidades para la elaboración del rotulador artesanal. El soporte, basado desde el clásico pote del carrete de fotos, hasta el desodorante o el pegamento en barra. Recortar el borrador de pizarra de felpa y crear con ello la punta. Cuadrada u oblicua. Tú decides el grosor y su resultado final. Algunos bajos y ahuesados. Otros, con la punta atada, suficientemente ancha y resistente para realizar el máximo trazo posible. Sustituto de la tiza, el Kampfor, el edding 800 o el Kores naranja. Tan antiguo como cualquier tinta de droguería. Válido con laca de bombilla, edding, instamark, tinte Buffalo, o la propia Titan, diluida con alcohol isopropílico. Su apodo muy sonoro entre los escritores. Un elemento de culto, oculto. Los únicos y originales rotuladores. Los emuladores de fábrica no sirven cuando intentas reflejar un concepto bastante olvidado.